Los Blogs y los Ticos

Por José Ernesto Herrera.

En Costa Rica la polarización de los medios de comunicación está centrada en 6 grupos que dominan el mercado de la información diaria.

Hablamos del Grupo Nación, Diario Extra, Repretel, Teletica, TBC y los demás medios de comunicación pequeños pero no asociados a medios “hermanos” que conforman la oferta informativa de cada día.

Es por esto que cala la necesidad de espacios alternos de comunicación con el mismo grado de profesionalismo que imprimen los medios tradicionales del país. Y en este entorno, los blogs se han convertido en espacios periodísticos de alto renombre e importancia informativa.

Desde hace algunos años, espacios como blogger.com, pitas.com, blogger.com, o blogalia.com, ofrecen gratuitamente espacios para colocar sus blogs. No obstante ha sido tanto el bum de estos espacios que se calculan cerca de 10 millones en la red.

En el blog de Javier Jiménez, Weblogs: ¿ Otra forma de Periodismo?; se trata de hacer conciencia en la necesidad de marcar esa pauta en la calidad de un producto.

“La idoneidad, seriedad y profesionalización de los contenidos difundidos en los weblogs, no viene establecida por su facilidad de difusión y creación sino por el contenido que en ellos se representa y su potencial utilidad periodística”, señala.

Y es que los blogs se han convertido en una herramienta sencilla de publicación online, empero la clave en el éxito de una página web realizada por profesionales de la comunicación está en notas muy actualizadas por su autor y cargadas de enlaces y comentarios.

En nuestro país son pocos los blogs que han logrado sobrevivir en el mercado y lo más importante, mantener una popularidad y reconocimiento constante en el entorno.

El autor señala de varios autores que aunque son periodistas y trabajan en medios de comunicación de tradición, son dueños de sus propios blogs, creándose un gran reconocimiento y ejemplo dentro del marco periodístico.

Costa Rica, con su mercado de casi cinco millones de habitantes es capaz de explotar calidad informativa, y en la medida de lo posible, es nuestro deber explotar los canales que conduzcan a la sociedad a ser participes directos del acontecer nacional.